El reportaje fue realizado por el El Mundo y relata la historia de una pareja en la que la esposa, Gina Marquéz, era aficionada, y el, Patricio Gordon, antitaurino. Éste se convirtió en el momento en que aceptó la invitación de su pareja para ir a una Corrida de Toros.
La admiración que los aficionados tenían por el toro como animal, creó un impacto en Patricio, de tal forma, que más tarde convirtió su casa en un museo taurino, escribió un libro sobre el tema y enseñó a su hijo de 2 años a torear. Una historia imperdiblel!
Vea Aqui la historia íntegra transcrita por el periódico Diário de Notícias